Platja de l´Ampolla |
En estos tiempos donde, Wert, Gallardon, Montoro,
Cospedal, Pons, y otros, nos retrotraen a épocas imperiales, mientras el
enanito Mudito, hace honor lo que se dice de su paisanaje gallego.
En estos tiempos donde
el PSOE, no sabe no contesta, con líder o sin líder.
En estos tiempos donde las pequeñas formaciones
políticas, en honor a un pacto de interés, se las tiene amordazadas. Y ellas
mismas, cada dos por tres se fagocitan, surgiendo unas nuevas o coaligándose,
hasta descolocar al ciudadano, que al fin desconfía de tanta inestabilidad.
Castillo de Moraira y Torre del Cap D´Or |
En estos tiempos de gobierno donde, Robín Hood se ha
vendido a la nobleza (mierda de bancos, aseguradoras, iglesia, amigos, hijos de
amigos e hijos de su madre) dejando pelado al pobre.
En estos tiempos, donde los dirigentes y los que se creen
algo, pelean por una fotografía bajo una placa, detrás de un cartel, con un
grupo de subvencionados satisfechos por una limosna, o por una distinción
cualquiera.
En estos tiempos,
en esta Comarca de la Marina Alta echo en falta medios de comunicación
valientes, que digan, cuenten y soporten artículos donde se denuncien los
incumplimientos, las medias verdades, los expolios, el mamoneo y el
favoritismo.
Los contados medios que existen, están bajo el control de
unos pocos, y esos, se limitan a dar palos a quien no paga y a reproducir, como
la voz de su amo, las noticias que les dictan los que sí, partidos o gabinetes
de las alcaldías. Por supuesto, su nómina mensual les será satisfecha, aunque
sus pretendidos ideales se queden en pura charlatanería.
Todo esto viene a
cuento porque en los últimos tiempos veo, con demasiada frecuencia y
descaradamente, un ataque calculado en Teulada-Moraira. Observo que quienes
atacan, vista la publicidad que soportan, no tienen “subvención” municipal.
Lógico pues, tiempos de Al Capone, pague su tranquilidad
y le saco en las fotos.
No paga Ud.?, tranquilo, le preparamos un ataúd lleno de
recriminaciones, sospechas y consejos. Mientras vamos colocando las cargas de
dinamita que nos facilitan los que pueden comprarlas.
Los pobres, no.
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