Este 2 de junio de 2014, y por tres motivos, ha sido para mi
muy intenso. Por un recuerdo, un adiós y una bienvenida.
El recuerdo:
El día 22 de noviembre de 1975, con 17 años, solo, con un abrigo
de mi padre, una bolsa de deportes Adidas, muerto de frio e ilusionado, vivi
las horas intensas de un cambio en la política española. Frente al edificio del
Congreso de los Diputados, fui testigo de un hecho histórico, la proclamación
como rey de España por las Cortes Españolas de Juan Carlos I de España. Aquel
día frio y soleado de noviembre, por los altavoces de ambiente, aun con el rumor del público congregado, escuchamos
lo que en el interior se decía. El juramento y el discurso. Pese a haber jurado fidelidad a las leyes del
Movimiento, en su discurso afirmó que quería ser Rey de todos los españoles, cosa
que considero ha cumplido. Con su
actitud, promovió y alentó, junto
a Adolfo Suarez como Presidente del Gobierno y Torcuato Fernández Miranda como Presidente de las Cortes Españolas, la Ley para la Reforma Política, que fue
votada por el Congreso de los Diputados el 18 de noviembre de 1976 y aprobada
en referéndum con un abrumador apoyo del 94%, lo que inició la Transición
Española hacia la democracia.
Hoy 2 de junio, casi 39 años después, ese Rey, abdica,
dimite o renuncia. El hecho pilla por sorpresa a muchos, pero a mí, ni me
extraña ni me parece mal. En un tiempo en que , otros reyes europeos ya han
realizado ese gesto y el más extraordinario aun, que un Papa, dimita, no tiene
nada de raro ya.
Veo que, haya manifestaciones solicitando un referéndum sobre
el modelo de estado, República, se pide. Me alegro de que se puedan hacer esas
manifestaciones, y comparto inquietudes, aunque no comparta prioridades.
Con la abdicación y la reciente muerte de Adolfo Suarez, la
Transición Politica Epañola ha terminado definitivamente.
Empieza otra transición. Ilusionante e inquietante, pero seguro
que pacifica, sensata y ejemplar como fue la anterior. Solo pido respeto a las
ideas y opiniones de los demás, son tan legitimas como las propias. Así seguro
que acertaremos.
Decir adiós, aunque sea por breve tiempo y lejanía, a veces
es un acto de valentía, sobre todo si a donde se va, es en ese momento, no es
el Paraíso. Decir adiós, hasta pronto, y por delante 10.200 kilometros y doce
horas avión, más otras tantas cuando vuelves, sera un ejercicio físico y
mental.
Pues bien, hoy son adioses, mañana binvenido y espero que
pronto , aquí estoy de nuevo.
Hoy a nacido Shantal Aguila Ramirez. Bienvenida al mundo loco en que vivimos.
Felicidades a sus padres que con tanta ilusión la han recibido. Felicidades a
su abuela, que tanta alegría le ha producido la noticia y que aun en la
distancia ha estado viviendo el momento.
Y me felicito a mí, porque he vivido estos tres momentos
intensos.
Y a pesar de todos los pesares.
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